En muchas ocasiones nos surgen dudas sobre qué ventanas escoger y a qué darle importancia a la hora de escoger una. En el post de hoy vamos a hablar de: Los tipos de acristalamiento.
En muchas ocasiones nos surgen dudas sobre qué ventanas escoger y a qué darle importancia a la hora de escoger una. En el post de hoy vamos a hablar de: Los tipos de acristalamiento.
Si a la ventana de calidad le sumas un buen acristalamiento, el resultado será un óptimo aislamiento acústico, supondrá un importante ahorro energético y nos protegerá del frío/calor (aunque la ventana esté cerca de una cama), además de otras muchas más ventajas que veremos a continuación.
Hay que considerar cuatro parámetros fundamentales: cuánto calor pierde a través de sí mismo, cuánto calor solar deja entrar en forma de radiación, cuánto atenúa el ruido y cuánta luz lo atraviesa.
Tendremos en cuenta la orientación de la casa y también el objetivo que buscamos; ruido, calor, frío… Debemos intentar conseguir lo que queremos del vidrio sin penalizar la entrada de luz, que debería mantenerse por encima del 65%.
Lo más importante para elegir un vidrio son el aislamiento térmico y acústico, la seguridad (siendo la rotura en microcristales la más útil para evitar daños) y la cantidad de luz que permiten pasar, que al fin y al cabo es a lo que deben su existencia.
Te ayudo a decidir cuál será el mejor para nuestro hogar, en función de nuestras necesidades:
Dispone de dos paneles, uno interior y otro de endurecido para así mantener el calor y reducir el coste en calefacción, reducir el ruido del exterior, aumentar la seguridad interior y proteger contra las inclemencias metereológicas fuertes.
Dispone de dos vidrios, uno laminado, otro templado y 3 capas más adicionales para un mayor aislamiento térmico. De esta forma reduciremos la perdida de calor y el ruido de fuera, aumenta la seguridad gracias al vidrio laminado, es más fácil de limpiar y reduce significativamente el rocío.
Tiene acristalamiento laminado, así como 3 capas de acristalamiento con gas krypton (especial para aislar térmicamente) y un vidrio laminado. Todo ello contribuye a reducir la perdida de calor, el ruido exterior, el rocío y a diferencia de los dos anteriores consigue una atenuación del ruido de la lluvia.
Este acristalamiento dispone de dos vidrios, uno laminado y otro endurecido. De igual manera que el anterior, mantiene la calor, reduce el ruido, aumenta la seguridad interior, protege contra nevadas y tormentas pero, además, mejora la seguridad contra robos gracias a un vidrio más grueso.