¿Sigues trabajando desde casa en estos días? Tener un espacio de teletrabajo bien organizado, con la luz natural y el aire fresco como protagonistas, pueden ayudarte a mejorar tu estado de ánimo e incluso tu productividad laboral.
¿Sigues trabajando desde casa en estos días? Tener un espacio de teletrabajo bien organizado, con la luz natural y el aire fresco como protagonistas, pueden ayudarte a mejorar tu estado de ánimo e incluso tu productividad laboral.
Aquí te damos 5 consejos para hacer tu espacio de trabajo todavía más saludable:
Tener todo en su sitio es la mejor manera de empezar una jornada laboral. Tu bolígrafo favorito, una hoja limpia o una taza de café pueden ser un buen comienzo. También te recomendamos que equipes tu espacio con una silla cómoda y una mesa de trabajo espaciosa y a una altura adecuada.
Incorpora plantas de interior para hacer más agradable tu rincón de trabajo, ya que actúan como purificadores de aire y proporcionan más oxígeno. ¡Algunas incluso eliminan las partículas tóxicas de aire! También te proponemos que coloques unas cuantas flores en tu mesa de trabajo para dar ese toque de colo.
La mejor forma de conectar directamente con la naturaleza y el exterior es cuando damos paseos. Disfruta de un breve descanso de trabajo paseando alrededor de tu vivienda, si las condiciones lo permiten, en contacto con la luz natural, el aire fresco y la naturaleza en todo su esplendor.
El aire que respiramos es tan importante como los alimentos que ingerimos o el agua que bebemos. Las actividades que realizamos en casa inundan de partículas contaminantes el aire interior que, si no se renueva, acaba siendo muy perjudicial para nuestro organismo. De hecho, podemos experimentar dolores de cabeza, mareos, fatiga e irritación de la garganta.
El vapor de la cocina, la ropa húmeda, las velas, los productos de limpieza y el polvo son algunas de las causas comunes que denotan una mala calidad del aire en el hogar. ¡No te preocupes! Mejorar el aire interior es muy fácil: puedes limpiar regularmente, elegir productos de limpieza naturales y ventilar las habitaciones varias veces al día durante al menos 10 minutos. ¡Ya verás cómo notas la diferencia!
Y es que el acceso constante al aire fresco ayudará a que nuestro cuerpo se sienta más liviano y nuestra mente mucho más productiva: ¡una gran receta para una jornada laboral provechosa!
Junto con el aire fresco, la luz del día es esencial para nuestro bienestar y tiene efectos positivos en nuestro sueño, estado de ánimo y capacidad de aprendizaje. Los niveles estables de exposición a la luz solar durante el día mejoran nuestro ritmo circadiano de 24 horas, vital para que nuestros cuerpos se sientan equilibrados.
Intenta que en tu zona de trabajo esté presente la luz del día el mayor tiempo posible. Para empezar, lo primero que tienes que hacer es arrimar tu escritorio a una ventana. Esto te dará un flujo constante de luz natural, además de un acceso directo al aire fresco y unas vistas con el exterior. ¿No es agradable mirar por la ventana y disfrutar de las vistas?
Si puedes, opta por colores claros para la decoración, ya que maximizará la sensación de la luz del día a tu alrededor.
Además, cuando hagas esas pequeñas paradas para tomarte un café o desconectar cinco minutos te recomendamos que lo hagas cerca de una ventana, para recibir la mayor cantidad de luz posible.
Es importante que hagas tuyo ese rincón de trabajo. Tu pintura, lista de reproducción, taza de café o flores favoritas. Trabajar en casa nos da más flexibilidad para reorganizar nuestro entorno tan a menudo como lo necesitemos.